Era Napoleónica

Este tiempo ha marcado nuestra región, en aquel entonces el Gran Ducado de Berg. El «Código Napoleón» estuvo vigente más allá de su reinado. Mucha gente compartían las ideas de libertad, igualdad y fraternidad de la Revolución Francesa.

En aquel entonces, la servidumbre y los gremios todavía dominaban la vida privada y profesional. Además, los súbditos tenían que financiar las cortes de sus soberanos a través de altos impuestos, aunque ellos mismos eran pobres.

La frontera del Rin

La revolución francesa en 1789 trastornó Europa y poco después la guerra escaló. En 1794, tropas franceses ocuparon la orilla izquierda del Rin con Bonn y Colonia, de hecho entonces el Rin era la frontera entre la Francia Revolucionaria y el Sacro Imperio. En 1797, el general francés Napoleón Bonaparte derrotó a las fuerzas del Imperio y el emperador Francisco II tuvo que reconocer el Rin como frontera, el reconocimiento según derecho internacional siguió en tratado de Lunéville en 1801.

Al mismo tiempo se les prometió compensaciones a los duques alemanes que habían perdido territorios en la margen izquierda. Ya en este momento fue evidente que los únicos territorios disponibles fueron los estados muy pequeños y los estados eclesiásticos, es decir territorios poseídos por un príncipe-obispo como por ejemplo el arzobispado de Colonia.

El fin del arzobispado de Colonia (1803)

De consecuencia, el 25 de febrero de 1803 la Dieta Imperial (en alemán: Reichstag) aprobó una resolución, la «Conclusión Principal de la Delegación Imperial Extraordinaria» (en alemán: Reichsdeputationshauptschluss), estableciendo una gran redistribución de territorios. Con pocas excepciones los estados eclesiásticos y estados pequeños se secularizaron y mediatizaron, es decir otros estados les anexaron.

Así también el arzobispado de Colonia desapareció del mapa. Sus territorios al fin y al cabo pasaron en las manos del duque de Berg, el cual les cedió a Napoleón pocos años después. La abadía de Heisterbach fue disuelto y su demolición decretada.

El fin del Imperio

Después de la derrota del emperador Francisco II en la batalla de Austerlitz los acontecimientos se precipitaban.

La Confederación del Rin (1806)

Los nobles da la orilla derecha del Rin se unieron y formaron la «Confederación del Rin» (1806) bajo protectorado francés, y así de hecho acabaron con el Sacro Imperio. El último emperador, Francisco II, tomó las consecuencias: el 6 de agosto de 1806 abdicó a la corona y decretó la disolución del Sacro Imperio.

Bloqueo continental

Napoleón había derrotado a Austria, Prusia y Rusia, pero fue derrotado en la batalla de Trafalgar. Cuando no pudo conquistar Inglaterra, eligió embarcarse en una guerra económica. Así que decretó el bloqueo continental: a ningún país se le permitía comerciar con Inglaterra, a ningún puerto se le permitía dejar embarcar a los barcos ingleses.

Pero al mismo tiempo Napoleón había decretado el servicio militar obligatorio, y sus guerras exigían cada vez mayores sacrificios del pueblo. Al final, la imagen de Napoleón como portador de esperanza se oscureció, ya que para muchos no era más que un déspota que quería gobernar toda Europa a cualquier precio y envió a la muerte a innumerables personas a cambio.

Por aquel entonces en el Siebengebirge

El 15 de marzo de 1806 el duque de Berg, desde poco también rey de Baviera, cedió el ducado a Napoleón.

El Gran Ducado de Berg

Este lo agrandó, incluyendo también la ciudad de Königswinter con las montañas Wolkenburg y Drachenfels, antes territorios del arzobispado de Colonia. El nuevo Gran Ducado de Berg, junto con el Reino de Westfalia, debería ser «estado modelo» para los estados de la Confederación del Rin.

Reformas

Primer Gran Duque fue el cuñado de Napoleón, general Joaquín Murat, en 1808 Napoleón mismo asumió el mando en Berg. La justicia, la administración y el ejército se reorganizaron según el modelo francés y los idealismos de la revolución francesa llegaron al Gran Ducado de Berg: la libertad de profesión, la abolición de los privilegios de la nobleza y el fin de la señoría. El «Código Napoleónico» aseguraba la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley.

Servicio militar

Pero Napoleón también reclutó soldados en los estados de la Confederación del Rin, 5.000 de Berg cada año, para que lucharan en sus campañas, lo que les afecto mucho a la gente. Los soldados del Gran Ducado de Berg lucharon contra Prusia y en España. En la última guerra napoleónica, un sinnúmero de soldados franceses y auxiliares perdieron la vida.

Guerras de liberación

Los ejércitos revolucionarios se habían convertido en ocupantes, y en los ojos de mucha gente, el emperador Napoleón había traicionado los ideales de libertad, igualdad y fraternidad. La catástrofe de la «Grande Armée» en Rusia fue el momento de cambio.

Desastre en Moscú

Finalmente, el bloqueo continental llevó a la ruptura entre el zar Alejandro I y Napoleón. Así que Napoleón estaba decidido a entrar en la guerra. El 23 de junio de 1812, el Gran Ejército de 650.000 hombres cruzó el río Njemen. Con los 270.000 franceses marchaban muchos soldados de Prusia, Austria y la Confederación del Rin. El Gran Ejército derrotó a los rusos en la sangrienta batalla de Borodino en septiembre de 1812. Poco después tomaron Moscú, pero la ciudad fue abandonada. La misma noche, los rusos incendiaron su capital. Como la victoria era imposible y todos los suministros y barrios estaban en llamas, Napoleón finalmente ordenó la retirada.

Pero era demasiado tarde; el Gran Ejército había caído en el invierno ruso, y los cosacos lo atacaban constantemente. Al final de su fuerza, los soldados se abrieron paso a través de las líneas enemigas. Entre los franceses, solo sobrevivieron 18.0000, entre los 500 soldados de Berg 190.

El ducado de Berg arruinado

Cuando Napoleón estableció el bloqueo continental en su lucha para arruinar Inglaterra, el Rin llegó a ser una frontera aduanera. Aunque el Gran Ducado de Berg, como estado satélite, dependía del comercio con Francia para subsistir, también clasificaron los productos de Berg fueron como «hostiles», y se aplicaron impuestos muy altos sobre las importaciones. Así de hecho el Gran Ducado fue aislado de los mercados franceses y holandeses. Napoleón aceptó arruinarlo; dentro de poco, hambre y pobreza se extendían.

Leipzig 1813

En el verano de 1813, Rusia, Prusia, Inglaterra, Suecia, Austria y Baviera se aliaron contra Napoleón. En la «batalla de las naciones» en Leipzig en octubre de 1813, Napoleón fue derrotado y obligado a retirarse a Francia.

Congreso de Viena y Waterloo

Después de la derrota de Napoleón, hombres de estado de todas partes de Europa se reunieron en el Congreso de Viena para reorganizar Europa con respecto a países y territorios. Pero se disputaron y se pelearon hasta que se hallaron a borde de una guerra entre ellas. Esto le dio la oportunidad a Napoleón de regresar por los «cien días». Luego sufrió una derrota fatal en Waterloo.

Por aquel entonces en el Siebengebirge

Los aliados le persiguieron y avanzaron al Rin, la Confederación del Rin se vino abajo.

Landsturm vom Siebengebirge

En noviembre de 1813, el mayor prusiano von Boltenstern apareció con sus tropas en Königswinter. Junto con ciudadanos formaron el «Landsturm del Siebengebirge», una milicia de ciudadanos armados. Von Boltenstern y 150 voluntarios trataron de retomar Colonia, pero fracasaron y von Boltenstern falleció.

El mismo día, los soldados prusianos y los combatientes del «Landsturm» atacaron las tropas francesas en la orilla izquierda del Rin desde la isla de Nonnenwerth. En este combate, falleció el ciudadano Johann Josef Genger. Hay un monumento encima del Drachenfels, «Landsturmdenkmal» en alemán, que nos recuerda von Boltenstern, Genger y los demás combatientes. En enero de 1814, los franceses abandonaron Colonia, en marzo la margen izquierda del Rin fue liberada, a fines de marzo los aliados entraron en París. Napoleón tuvo que abdicar y fue exiliado a la isla de Elba como principado. Pero la situación quedó intranquila.

La Confederación Germánica

Al fin y al cabo, el Congreso de Viena restableció la orden feudal prerevolucionaria. Prusia obtuvo Renania y Westfalia. Los Estados alemanes siguieron independientes como antes y formaron una «Confederación Germánica» no muy estable. Un tiempo de restauración empezó, pero las esperanzas de lograr una unión nacional y la democracia quedaron.