En el Rin Medio, cuatro príncipes electores del Sacro Imperio y duques locales hicieron construir castillos aduaneros para cobrar peajes.
Nuestra región está situada en el norte del valle del Rin Medio. Hablando en términos medievales, era la frontera sur del arzobispado de Colonia. Aquí, cuatro de los siete príncipes-electores del Sacro Imperio Romano, los arzobispos de Colonia, Maguncia y Tréveris y el Conde Palatino del Rin, ocupaban territorios, y también muchos duques regionales. El mapa parecía un mosaico.
Peajes como fuente de ingresos
Estos príncipes y duques del Rin habían descubierto que los peajes eran una fuente de ingresos lucrativa. Por eso hicieron construir castillos aduaneros para asegurarse de que ningún barco pudiera pasar por su territorio sin pagar. El castillo de Pfalzgrafenstein en Kaub, construido en una isla del Rin, es un famoso ejemplo.
Los castillos Drachenfels y Löwenburg no eran castillos aduaneros.
Peajes en Bonn
El puesto aduanero más cercano era Bonn (en sentido estricto, Bonn ya no es el Rin Medio).
Aquí el arzobispo de Colonia, Konrad de Hochstaden recaudó peajes, pero sin aprobación del emperador Federico II, y por eso era ilegal. Sin embargo, al arzobispo no le importó nada en absoluto, ya que había cambiado de campo. En la llamada «lucha final» entre el papa y el emperador, que era una guerra de exterminio, él apoyó al papa.
A lo largo de las décadas siguientes, el puesto aduanero de Bonn era objeto de disputa. Cualquier candidato al trono que necesitaba el voto del príncipe-arzobispo para hacerse elegir le concedía el derecho de recaudar peajes en Bonn, al menos por algunos años. No obstante, algunos reyes luego cambiaron su política y trataron de liberarse de los principes. Por ejemplo, el rey Alberto I de Habsburgo aún luchó para acabar con el poder de los príncipes-arzobispos, y prohibió el peaje.
Eventualmente, los príncipes-arzobispos tuvieron más influencia que el rey. A principios del siglo XIV se les concedió el derecho de recaudar peajes en Bonn, incondicionalmente y para siempre.
Los cañones están llegando
Sin embargo, la época de los castillos y los caballeros llegó a su fin. En las batallas decisivas de la Baja Edad Media, los caballeros fueron derrotados. La mayoría de los castillos no pudieron resistir la potencia de fuego superior de los cañones.
1689 fue un mal año para Renania. Los soldados del rey Luis XIV de Francia destruyeron muchos castillos aduaneros en el Rin, entre ellos el Mäuseturm, Ehrenfels, Sooneck, Stolzenfels, Stahleck, Lahneck, Arenberg, Fürstenberg y Heimberg.
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